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Nueva normatividad para ordenar usos de suelo en DF, es un avance; pero no es suficiente aún

 

* Se publican en la Gaceta Oficial del DF sanciones administrativas y penales en contra de quienes contravengan usos de suelo autorizados

 

*  En 12 años de existencia de la PAOT, irregularidades en los cambios de uso de suelo han sido una de las principales causa de denuncia

 

 

Por Antena Radio / Edición vespertina / Sección Medio Ambiente, ¿Qué puedo hacer yo?, Francisco Calderón Córdova / IMER Horizonte 107.9 FM y 1220 AM / Ciudad de México /  13 de enero de 2014.

 

 

Este sábado -11 de enero de 2014- entró en vigor un paquete de reformas y adiciones a los códigos penal y de procedimientos penales del Distrito Federal, con el que se busca dar orden al desordenado cambio de usos de suelo que se experimenta en prácticamente las 16 delegaciones políticas de la capital del país. Como lo señalé la semana pasada en este mismo espacio, una de las principales causas del deterioro ambiental y de la afectación a la calidad de vida de las personas –en nuestra ciudad y, de hecho, en todo el mundo- es la paulatina transformación de la vocación original del suelo a usos distintos y muchas veces contrarios a sus potencialidades.

 La representación más genérica de este fenómeno de cambios de uso de suelo es la tala de un bosque o de una selva natural, para transformarle en tierras de cultivo o para el pastoreo de ganado; y, en una segunda etapa, cuando las zonas agrícolas se convierten en terrenos que albergan infraestructura urbana de distintas magnitudes, con vialidades, desarrollos habitacionales, servicios comerciales e industriales. Es en esta etapa cuando los usos del suelo adquieren una enorme complejidad y comprometen severamente al bienestar de quienes habitamos en ciudades. Pensemos, por ejemplo, en la construcción de un complejo habitacional en una barranca o sobre el cauce de un antiguo río; esto, sin lugar a dudas, implica un eventual riesgo para la población y contraviene cualquier precepto en materia de protección civil.  

Pero también, la construcción de edificios que incrementan la densidad de población en colonias donde la infraestructura vial, eléctrica, de suministro de agua o de drenaje es limitada, indiscutiblemente tiene efectos directos en el acceso a los servicios, la movilidad y, en general, sobre la calidad de vida de los vecinos. Durante los 12 años de operación de la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial del Distrito Federal (PAOT) los cambios de uso de suelo en la ciudad han sido una de las principales causas –si no es que la principal- por la que la ciudadanía presenta denuncias. 

 

Foto: Paco Calderón, 2014.

 

Finalmente, hace un par de días se ha publicado en la Gaceta Oficial del Distrito Federal una serie de nuevas atribuciones para las autoridades capitalinas que, de manera directa, pueden incidir en el uso ordenado del territorio de la capital. Sobre todo, se han reconocido aquellos procedimientos normativos y administrativos que han sido susceptibles de ser corrompidos no sólo por algunos servidores públicos carentes de ética, sino por ciertos particulares y desarrolladores inmobiliarios que sólo trabajan por el beneficio propio y no así por el de la ciudad, el de sus habitantes y el del medio ambiente. 

De operarse con pulcritud, este paquete de reformas –que impone sanciones administrativas y penales para quienes las contravengan- dará certeza, sobre todo, a un mercado inmobiliario viciado y cuyas facturas generalmente terminaban siendo pagadas por los compradores de buena fe (y no así por las empresas constructoras). 

Ahora, los habitantes de la capital tendremos que estar muy pendientes de lo que suceda y de lo que eventualmente aprueben los miembros de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, única autoridad que tiene la facultad de cambiar los usos del suelo –a través de los programas de desarrollo urbano- en nuestra ciudad y, desde luego, en su territorio de conservación.

Por lo pronto, es importante que quienes estén por dar el serio paso que implica el hacerse de un patrimonio adquiriendo una vivienda o cualquier bien raíz, lo hagan utilizando todos los instrumentos legales que le darán certeza sobre el uso de suelo autorizado para su nueva propiedad.

Este paquete de reformas y adiciones normativas es una buena noticia para los habitantes del Distrito Federal; sin embargo, aún hay un largo camino que recorrer para detener y revertir los deterioros causados por las autorizaciones (ilegales o no) a los cambios de uso del suelo, tanto en esta ciudad como en todo el territorio nacional.

 

Foto: Paco Calderón, 2014.

 

 

Diversidad Ambiental ©, es una publicación virtual de Paco Calderón