México tiene una ubicación privilegiada para aprovechar y desarrollar la energía solar

 

* El 18% de la generación de energía eléctrica en el planeta es de fuentes renovables; en México, sólo el 3% de la electricidad proviene de estas fuentes

 

* Del 3 al 7 de noviembre próximos, el Centro de Convenciones de Cancún, en Quintana Roo, será la sede del Congreso Mundial de Energía Solar

 

Por Antena Radio / Edición vespertina / Sección Medio Ambiente, ¿Qué puedo hacer yo?, Francisco Calderón Córdova / IMER Horizonte 107.9 FM y 1220 AM / Ciudad de México / 29 de julio de 2013

 

Seguramente usted –apreciable radioescucha-, ha oído decir que México se encuentra en una posición geográfica privilegiada para el aprovechamiento y el desarrollo de la energía solar. Y, efectivamente, esto es cierto debido a que el 70 por ciento de los días del año en nuestro territorio son días soleados y porque contamos con los mayores índices de radiación del planeta (índices que van de los 4.4 kWh/m2 por día en la zona centro, a los 6.3 kWh/m2 por día en el norte del país).

En la actualidad, la energía que recibimos del sol está siendo aprovechada a través de dos tecnologías de conversión: los sistemas fotovoltaicos y los fototérmicos. Los primeros convierten la luz solar en electricidad sin utilizar ningún proceso intermedio; y, los segundos, aprovechan el calor del sol para producir vapor y mover así, por ejemplo, turbinas generadoras de electricidad. Junto con la energía eólica (viento), la mini-hidráulica (ríos y caídas de agua), la biomasa (materia orgánica), la geotérmica (calor de las capas internas de la Tierra) y la oceánica, la energía solar ha tenido un aprovechamiento creciente en distintos países del mundo durante los últimos años.

 

 

Este tipo de energías “renovables” significan hoy el 18 por ciento de la generación de electricidad en todo el planeta, destacando Alemania, Japón, Estados Unidos y España, por su mayor capacidad instalada de energía fotovoltaica. En México, el 75 por ciento de nuestra electricidad es generada a través de la quema de hidrocarburos; el 19 por ciento por las grandes hidroeléctricas; un 2 por ciento con tecnología nuclear y sólo un 3 por ciento mediante fuentes renovables, principalmente la energía eólica o del viento. 

A pesar de nuestra ventajosa ubicación geográfica, el uso de la energía solar en el país se encuentra muy por debajo del de otras naciones que cuentan con muchísimo menos días soleados al año. En comparación con Alemania, estamos produciendo menos del 1 por ciento de electricidad a partir de la energía solar, y sólo el 3 por ciento de lo que generan los Estados Unidos. El aprovechamiento de la energía solar en México se ha desarrollado, básicamente, en proyectos de infraestructura fotovoltaica para la electrificación de comunidades rurales de difícil acceso en los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Veracruz.

Los sistemas fototérmicos también han recibido un impulso notable en nuestro país. Este es el caso del Programa para la Promoción de Calentadores Solares de Agua en México 2007-2012 (PROCASOL), que ha alcanzado cifras interesantes en cuanto a viviendas que hoy utilizan ya esta fuente renovable de energía. La Comisión Federal de Electricidad (CFE), por su parte, cuenta ya con programas que reducen significativamente las tarifas a usuarios que cuentan con tecnologías fotovoltaicas en sus domicilios.

La utilización de la energía solar en el país –y, desde luego, en todo el mundo- abre enormes áreas de oportunidad para alcanzar un desarrollo con bajas emisiones a la atmósfera de gases de efecto invernadero y, por supuesto, de mayor sustentabilidad ambiental. 

Del 3 al 7 de noviembre próximos, el Centro de Convenciones de Cancún, en Quintana Roo, será la sede del Congreso Mundial de Energía Solar. Asistirán más de mil 500 congresistas de 120 países, todos ellos convocados por la Sociedad Internacional de Energía Solar y por la Asociación Nacional de Energía Solar.

 

Ésta será una oportunidad inédita, tanto para empresarios como para autoridades de todos los órdenes de gobierno, de conocer e incorporar a muchas de sus actividades cotidianas fuentes de energía barata, renovable y amable con el medio ambiente. Yo invito a los tomadores de decisiones del sector productivo, de servicios y gubernamental, a que se acerquen a la Asociación Nacional de Energía Solar y se sumen a la transformación energética que, sin lugar a dudas, ya está viviendo el mundo y nuestro país. ▄